Hoy quiero compartir con vosotros un “truco” para que podáis cambiar vuestro estado de ánimo a vuestro antojo. Os invito a que probéis y compartáis vuestras experiencias en este blog; de hecho esta es la razón por la cual lo creé, para que fuera algo vivo; un nexo de comunicación entre mis amigos, mis lectores y yo.
Desde hace años la sabiduría popular nos ha transmitido la relación entre la mente y el cuerpo. Lo novedosos es que, según las últimas investigaciones en Neurociencia y PNL, esta relación funciona también al revés: nuestro cuerpo cambia nuestra mente.
Puedes usar esta poderosa conexión para cambiar tu estado de ánimo y conseguir atraer a tu vida todo aquello que deseas.
El lenguaje corporal refleja con mucha certeza como nos sentimos. “La cara es el espejo del alma”, es una de las frases populares que explica la estrecha conexión mente y cuerpo. Sabemos que cuando estamos deprimidos andamos cabizbajos, con los hombros hacia dentro y la mirada hacia el suelo. En cambio, si estamos eufóricos nuestro paso es enérgico, la sonrisa se dibuja en nuestra cara y nuestra mirada se eleva.
Ahora bien, si aunque no te encuentres de buen humor empiezas a andar erguido, subes la mirada y sonríes durante unos minutos lograrás engañar al cerebro, éste creerá que estás alegre y habrás conseguido cambiar tu estado. Los cambios fisiológicos producen importantes efectos en nuestro estado anímico.
Armoniza tu fisiología ( esto es, tu postura, expresión facial, ritmo de la respiración, tus palabras tono de voz) con aquello que quieres sentir y le estarás enviando al cerebro señales claras para la creación del estado que deseas conseguir. En cambio, si le mandas mensajes contradictorios o de abatimiento sólo lograrás encontrarte confundido o aún peor.
En resumen, empieza ya a adoptar todas las señales fisiológicas que sean necesarias para conseguir el estado que deseas. Merece la pena el esfuerzo porque un óptimo estado de ánimo es básico para atraer a tu vida todo aquello que anheles.