Hay cientos de artículos en Internet explicándote que TIENES que hacer para enamorar a un hombre. Quizá pienses que te voy a decir cómo debes comportarte para que ÉL caiga rendido a tus pies o te diga los 10 errores que le alejan (o le acercan) a ti.
Nada más lejos de mi intención.
Te diré lo que creo que tienes que hacer para que tu chico caiga rendido en los brazos de Cupido: NADA. No puedes hacer absolutamente nada.
Los hombres se enamoran en los 8 primeros segundos de ver a una mujer. Dependerá de que imagen crean que tiene que tener su mujer ideal, tu complexión física, cómo te mueves, cómo te ríes y de la energía que trasmites. Las mujeres elegimos si; pero entre los que nos han elegido previamente. Si él no se ha fijado en ti, puedes conseguir salir con él, tener sexo,…pero dudo mucho que se acabe enamorando de ti.
Este pensamiento explica porque hablamos de hombres que nos conquistan pero nunca oímos hablar de mujeres conquistadoras. En cambio, nosotras si nos dejamos influenciar por su comportamiento.
Esto es así desde el principio de los tiempos, cuando teníamos que evaluar si ese hombre iba a ser capaz de cuidarnos a nosotras y a nuestra “camada”. Por muy atractivo que fuera, lo que queríamos era que cazara y nos cuidara y protegiera y le observábamos para saber si lo iba a poder hacer.
Me estoy refiriendo al enamoramiento propiamente dicho. A esa etapa donde las hormonas mandan y nos sentimos embriagados por el otro. Claro que pienso que nuestro comportamiento y personalidad es importante a la hora de establecer una relación de pareja firme y sólida en el tiempo y de mantenerla.
A menudo veo mujeres esforzándose por conquistar a un hombre sin ningún resultado. Da igual que te hagas la dura y no cojas el teléfono, le des celos con otro o acudas rauda y veloz en cuanto te llama. Si él no se ha enamorado, no lo hará. El hombre es cazador. Ve la presa y va a por ella. Está en su naturaleza.
Así que chicas, os recomiendo que os relajéis: sed y haced lo que os dé la gana. Fluir, reír, bailar y disfrutar de la vida…y que se enamore el que quiera o pueda.
